febrero 05, 2015

Cuarto de hotel

El mismo cuarto de hotel
recibe diariamente
a docenas de amantes.

Con tanta sangre en la pared
con tanto blanquecino semen
con tanta fingida desnudez
con tantas filias y tantas fobias
con tanto a solas que buscar
yo me pregunto incanzablemente
cómo es posible a los amantes amar.

Las sábanas son siempre blancas
y la señora que hace el aseo
se detiene a pensar en cada cama.

No hay comentarios: