Ojalá pudiera decirte un:
"Yo quiero ser como tú cuando sea grande",
pero ya lo soy y tú apenas tienes ocho años
y me impactas por ser pequeño y ser un sabio
capaz de volver nacarada cualquier tarde.
Hay genios que nunca perderán su luz
y en estos terribles días son apenas contados,
tu eres uno de ellos y yo tan sólo te amo
por ser quien me baja cada noche de la cruz.
Para Axel.
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