abril 25, 2016

Plaga

Quizás sean miles ya
o millones
no lo sé de cierto
las hormigas que he matado.

Quizás sea ya
el Hitler de los insectos
o el anticristo de los formícidos
y no me importa
en lo mas mínimo
lo que me aterra
es que jamás se acaban
y parece ser que a ellas
la muerte no les importa.

Seguiré luchando
hasta que por fin puedan
devorarme un día cualquiera
al despertar las manos.

Y así mismo debe ser dios
con el hombre.

Pero yo no soy dios
sólo soy un asesino sin nombre.

No hay comentarios: