marzo 05, 2016

Le digo al trago

Que cada quién
sea capaz de cuidar
su ponzoñoso rabo
esa es
mi filosofía de vida actual
y lo será
supongo por un buen rato.

Estoy bebiendo a solas
en la mesa de la cocina
huracanando mis cabellos
y pienso en la alegría fatal
de la tristeza que da sonrisas
ante el eco de fieles caracolas.

Estoy francamente podrido
-le digo al trago que está conmigo-.

No hay comentarios: