octubre 09, 2014

Teatro

La trágica comedia culminó
como han de hacerlo todas:
la guitolla, la silla eléctrica
la cicuta, en fin, la muerte.

Es curioso que el hombre
al bajar el telón aplauda
y no pueda hacer lo mismo
cuando alguien le muere.

1 comentario:

Lasinverso dijo...

inmenso este poema.

Un placer venir a bucear en tu blog.

beso y verso