diciembre 25, 2010

I

¿Será a caso, que tengo las ganas
y no más; que me embriagan cual licores
formando torrentes de mil sabores
mientras del cabello me nacen canas?

Ahora bien me inventaría una vida
por vivir, alejado de tejados
maltrechos, de dogmas inveterados
bailando entre conjeturas podridas,

quizás, buscar un edén utópico
para deambular sin mi propia sombra
que me sujeta al suelo y te nombra,
en mis anocheceres alcohólicos;

un jardín con frutos y flores del bien,
donde reposen los sueños dorados
ahora ennegrecidos y arrumbados;
donde la pluma no presione mi sien.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Invéntate una vida por vivir, y luego dale vida...
Kas ganas al menos están, no?
Besos

Arya dijo...

Esos fondos.. siempre tienen sentido. Mas bajo tu pluma...

Un abrazo... no mejor un beso, escritor!