enero 07, 2012

Mi generación

Mi generación no es más que la misma
que la anterior y la que después viene,
aquella ahogada entre turbias marismas
y un alma etiquetada y sin higiene.

Algunos, idiotas iluminados
por estrellas colmadas de ventura,
algunos más, genios en desventura
preservando sus sueños astillados
por el peso de una moneda amoral
que nada compra y todo alegre vende;
otros tantos, de talante excepcional
perdieron entre los bosques sus duendes.

Yo no pertenezco a ninguno de ellos
cuando busco el sino muerto en el vaso
que me trae de vez en cuando el destello
de este ser sin ser que espera el ocaso.

Pero al final de todo compartimos
el mismo destino y la misma suerte:
nada cambiaremos -¡Nada!- y mentimos
cuando no temblamos ante la Muerte.

1 comentario:

perfecto herrera ramos dijo...

Hermoso poema, con profunda reflexión, que tiene el don de interpelarnos y mirar más allá del rostro impasible de la realidad que nos circunda.
Muy buen poema, Gabriel.

Un abrazo.