agosto 08, 2010

Hoy (Fragmento #4)

De ganas me muero por beber un trago y después de no mucho meditar, lo hago. Los números rojos que de mi billetera penden no logran darme la fatalidad del condenado a Muerte. Me entretengo husmeando entre mis sueños, entre aquellos que sin remedio se fueron, los que aún en ésta noche resaltan y pretenden ser venideros.
Hoy soy la hoja más seca de la hojarasca, movida por doquier por el sabio viento que refresca y la lleva siempre en direcciones abstractas. Soy el asceta de barbas blancas, al que no le importa el mañana ni lo que puede suceder con su calma, el trovador que hace mucho perdió la voz y la guitarra, el truhán que ha visto descubiertas por la multitud que expecta todas sus artimañas. Soy la última gota que provee el aguacero, el cielo gris que no hace más que aguardar al primer lucero. Soy la sombra que, bien lo sabe, al alba será aniquilada, el torbellino sin fuerza que no destrozará ningún cometa, el alma enardecida que habrá de salir sin titubeos de estas míseras letras.
Soy yo, al que no le importa la Gloria ni el final que pueda tener su mismo nombre, el gato que a la primera luz en el horizonte se volverá hombre. El mismo de siempre de figura enlutada, aquel rapaz al que a todo le da importancia y al que al final de cuentas no le importa nada.
Eso mismo, esta noche soy.

2 comentarios:

Ío dijo...

Imagino que quisiste escribir prosa.
Lo cierto es que no lo es; releo y releo en voz alta, y lo que alimenta a los labios es sencillamente poesía, una bella y lograda poesía, con sus rimas, con todo lo necesario para que el alma la encuentre y haciéndola suya se mimetice con sus sombras.
A todos nos lleva el viento, no lo olvide, señor GatoPardo
Aquí en este horizonte, un beso ronroneado

Ío

Anónimo dijo...

Eres lo que eres, con eso es más q suficiente.
Tal vez no te importe(nada), pero a mi si, descubrirte entre palabras.
Besos