El soplo del viento esparce cenizas
y puños dislocados, enrarece
la Luna y su conejo florece
entre espejos de arenas movedizas.
¿Quién soy, sino el loco que escribe tarde
en mayúsculas y en tinta negra,
carente de esa brisa azul que alegra
al corazón que se sabe cobarde?
Un racimo de sales de mar llega
desde otra aurora, vacila, se cuela
en mi mirar y hace fatua entrega
del turbio horizonte en acuarela
en el que mis manos sangran labriegas,
soñando alguna vez ser carabelas.
2 comentarios:
Supongo que conocerás una frase que se le atribuye al curioso Pablo Neruda..."Hay un cierto placer en la locura, que sólo el loco conoce".
:)
Voy a intentar ponerme al día con tu blog, por lo que respecta a mí, últimamente vivo en un desorden general que quiero poner en orden.
¡Y traduciré mi última entrada!
Ha sido un despiste no traducirla, lo siento.
Un cálido abrazo! :)
¡Hola! entre tu blog mientras miraba otros blogs y me gusta...Te sigo ^^
precioso poema me recuerda una frase de un poema de Neruda que si mal no recuerdo se titula "tengo miedo" y la frase es..."tiene mi alma un llanto de princesa abandonada en le fondo de un palacio desierto"
bsS**
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