marzo 03, 2010

Blasfemia #4

Esta Luna encantadora,
Esta noche embriagadora,
Y esta jornada agotadora.
Esta noche y su extraña luz
taciturna, apenas menguante.
Y yo un tanto cobarde
como el cristo en su cruz
flagelado y atónito
sólo que yo alcohólico,
clavado en mis prosas
con espinas de rosas.
Por que cristo en el plano mortal
al igual que tantos fue amoral,
concupisciente, lascivo,
displicente y copulativo.
A mí que no me vengan con pavadas
de asuntos celestiales
si la vida, siempre desencajada
se trató solo de asuntos terrenales.
¿Qué al infierno me iré?
Eso por demás lo sé,
junto con no se cuantos
ni a caso se si será grato.
Y aunque se unirán unos cuantos
al ver el camino trazado,
al notar el sendero atiborrado
de almas distintas y paganas
aunque al cabo sean arcanas.
Venga pues, la austeridad espiritual,
que vengan las ganas de celebrar,
la carencia divina
y está carga de nicotina,
el bendito estupor
causado por la botella de Ron,
por los días malgastados
en esté cuadernillo entintado
y por los demonios nacarados...
Dedicado a Cyborg Kif, que con su última entrada,
me ha puesto sin quererlo en mi lugar...

1 comentario:

Cyborgoo dijo...

Y ya seguro nos encontraremos en ese camino. Qué vengan las ganas de celebrar...de volverse locos por los detalles, de tener ansias por todo. No tengo cómo decir 'Gracias'...te pondré en mi cuaderno de escritos que me han gustado...En la portada, como presentador, el Rey Lagarto. Sí, ya estás ahí, plasmado, con tinta, a perpetuidad.