junio 03, 2012

De mis cuchillas y tu nada

Traigo una cuchilla bien afilada,
un par de burdos dimes y diretes
simulando en la guerra, los arietes
trastocando tu piel amurallada
y en el pecho una sombra malherida
que no quiere tu sonrisa perdida.

Nada sabes de mi, y este cruel verso
regurgitando penumbras tan calmas,
no ha de lograr descubrirme del alma
ni han de prodigarte tal beneficio,
ni cobijarte entre estos brazos míos
cuando me buscas en lechos sombríos.

Traigo una cuchilla bien afilada,
y no he de saber siquiera el proceso
para cortar tus alas desde el hueso,
desde tu Luna girando en mi nada.





1 comentario:

Arya dijo...

Suelen los cortes permitir salidas...
mejor si es desde los huesos


Creo que las nadas, tienen mucho de todo :)